Está demostrado que el transporte público es una de las formas más económicas y ecológicas para moverse por la ciudad, además en la época de crisis económica que estamos viviendo a todo no conviene vigilar al máximo nuestros gastos. Además el medio de transporte que utilizamos para ir al trabajo es otro de los gastos cotidianos que hacen más difícil llegar a fin de mes.
Pero si cambiamos nuestros hábitos reduciendo el uso del vehículo para todos los desplazamientos no sólo contribuimos a la conservación del medio ambiente sino que además podremos ahorrar dinero en gasolina.

 

 

Sabemos que la mitad del petróleo que se consume en España se emplea en el transporte, estos son los principales responsables de la contaminación y del aumento de CO2 en la atmósfera. Es por ello, que cualquier ahorro de energía en los motores o en el uso de combustibles alternativos que contaminen menos, tienen una gran repercusión.
El transporte supone emite a la atmósfera en torno al 26% de las emisiones de CO2 que se producen en España contribuyendo así al Cambio Climático y a otros problemas ambientales como la contaminación atmosférica.
Es por eso que os damos algunos consejos para ahorrar dinero en transporte y así también poder contribuir en la conservación del medio ambiente:

Transporte público o coche: para saber si económicamente si nos merece la pena hay que calcular cuánto cuesta ir al trabajo en coche y cuánto ahorraríamos utilizando el transporte público.
Calcular los viajes que realizas al mes: es importante realizar un cálculo del gasto mensual que realizamos en transporte público y sacar un abono mensual de transporte que nos salga más económico que sacar billetes de transporte a diariamente.

Comprobar si tienes derecho a un abono para colectivos especiales: desde hace años, algunos colectivos que la Administración estima que necesitan especial protección tienen derecho a abonos transporte más baratos, como pueden ser Jóvenes (hasta 23 años), mayores de 65, personas con discapacidad, familias numerosas, pensionistas, dependientes. Los descuentos pueden llegar a ser de hasta el 50% e incluso precios simbólicos.

Usar más la bicicleta: cada vez son más las ciudades que apuestan por el uso de las bicicletas, es por eso que existen ya muchas ciudades que facilitan estaciones y aparcamientos para bicicletas. Si realizas desplazamientos cortos por la ciudad o incluso para ir trabajar, puede compensar el realizar los desplazamientos en bicicleta.

Compartir el vehículo con personas de tu mismo trabajo: esta es otra opción para desplazarnos en recorridos habituales de diario o que tengan recorridos y horarios parecidos.
Ir caminando en desplazamientos cortos: quizás por comodidad o por costumbre solemos utilizar el coche para trayectos cortos que podrían realizarse en menos de 10 minutos caminando.