Etiqueta

revisartarifas

Explorar

 

Actualmente todos somos conscientes de la necesidad de hacer un uso responsable de la energía con el fin de proteger el medioambiente y también de llevar un consumo responsable en nuestros hogares y poder ahorrar en la factura e la luz. El consumo de luz es algo de lo que no podemos prescindir, pero sí que podemos obligarnos a cambiar ciertos hábitos de vida con el fin de reducir las emisiones contaminantes de dióxido de carbono.
Conseguir reducir en nuestros hogares la factura de la luz se ha convertido en una tarea complicada. Las facturas de gas y luz crecen sin descanso y suponen un gasto importante en el presupuesto de todas las familias de hoy en día.
Cada vez son más los motivos por lo tanto lo que nos obliga a realizar un uso racional de la energía eléctrica. Por todo ello, el ahorro de energía es una práctica que vamos a tener que incorporar a nuestra vida cotidiana, sobre todo en nuestros hogares.

ahorrar_luz_hogar

Ya sea por una causa ecologista, para que los aumentos de consumo eléctrico no disparen nuestra factura, o por ambos motivos, en nuestras manos está la posibilidad de ahorrar energía. Además sabemos que es posible simplemente con pequeños cambios en nuestra vida diaria que influyen en el gasto energético.
Aquí os damos algunos consejos básicos y muy sencillos para conseguir ahorrar luz en el hogar:

Ajustar la potencia la potencia contratada en el hogar.
La mayor parte de lo que pagas en tu factura es debido a la potencia contratada: cada 1,15 Kw de potencia suponen casi 50 euros al año. Por eso es importante realizar en el hogar una revisión de los aparatos eléctricos de uso diario y analizar que potencia es necesaria.

Revisar la tarifa contratada.
Actualmente no existe una única tarifa para el consumo eléctrico en los hogares, una tarifa con Discriminación Horaria puede ser una forma de conseguir ahorrar luz en el hogar. Para que este tipo de tarifa compense en el hogar y lleguemos a poder ahorrar en nuestra factura, es necesario concentrar al menos el 30% de la luz que consumes en un horario concreto (desde las 22 horas hasta las 12; desde las 23 a las 13 en verano).

Apagar los aparatos en stand-by.
Existe un consumo silencioso de algunos aparatos que mientras no estamos utilizando están en el modo stand-by, es decir están apagados pero encendidos. Mientras están en esta posición están consumiendo también energía. Por eso mientras no los estemos utilizando mejor mantenerlos completamente apagados

Usar de forma inteligente los electrodomésticos.
la mayoría de los electrodomésticos hoy en días disponen de programas que funcionan a temperaturas bajas. es importante tener en cuenta esta opción, ya que al calentar el agua es cuando más consumen los aparatos eléctricos.
Por poner un ejemplo, la lavadora a temperaturas entre 40ºC y 60ºC puede suponer un ahorro del 40% en luz.

Usar bombillas de bajo consumo o de LED.
Si utilizamos bombillas convencionales, estas sólo convierten en iluminación el 15% de la electricidad que consumen, el resto de consumo de las mismas es calor. Las bombillas de bajo consumo utilizan menos energía eléctrica,, normalmente entre un 50 y un 80% menos para producir la misma iluminación. Algo más a tener en cuenta en el uso de este tipo de bombillas es que tienen una vida útil mucho más larga que las normales.

Comprar electrodomésticos eficientes A+, A++ o A+++.
Se recomienda a la hora de comprar los electrodomésticos para nuestro hogar fijarse en los que consumen menos, estos vienen indicados mediante las etiquetas energéticas A+, A++ o A+++.

Instalar detectores de presencia.
En las zonas de más paso en el hogar, como por ejemplo pasillos o escaleras, puede resultar útil instalar detectores de presencia que activen la luz automáticamente, ya que de esta manera la luz permanecerá menos tiempo encendida, según la OCU.

Usar la plancha lo menos posible.
La plancha es uno de los aparatos eléctricos del hogar que más consume. A la hora de planchar, podemos acumular la mayor cantidad de ropa posible y regular la temperatura de acuerdo a la prenda que se está planchando.