Solo es necesario andar una hora al día para mejorar nuestra salud y bienestar. Es un ejercicio sencillo que no solo ayuda a nuestro físico, también a nuestra mente. Te contamos sus beneficios.
A veces vamos tan rápido por la vida que no encontramos tiempo para nosotros mismos, ni siquiera para cuidar un poco nuestra salud. Tenemos la intención de hacer más deporte, de salir a correr, de apuntarnos al gimnasio, pero entre unas cosas y otras pasa el tiempo y lo dejamos de hacer. Entre el trabajo, los amigos, la familia, compromisos…lo vamos dejando y cuidamos nuestras relaciones, pero nos olvidamos de nosotros.
No hay que hacer grandes esfuerzos, ni sacrificios para encontrarnos bien. Con buscar un ratito para nosotros para salir a caminar es suficiente.
Por qué andar una hora al día ayuda a nuestro bienestar
La actividad física regular de intensidad moderada, es decir, caminar, montar en bici o aquellos deportes que no sean de intensidad alta, ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares y diabetes. Además, reduce los niveles de colesterol.
Caminar una hora al día hace que mejore la fortaleza de nuestros huesos y nuestros músculos. Así como ayudar a la flexibilidad de nuestras articulaciones y a mantener activo el aparato motor. Es decir, ayuda a mantenernos jóvenes y activos, y a estar en forma.
Uno de los beneficios de andar una hora al día se refiere a nuestro bienestar mental. ¿No te ha pasado alguna vez que te sientes tan atrapado que necesitas salir, estar solo? Prueba a darte un paseo, aunque sea de cinco minutos, una vuelta a la manzana. Caminar ayuda a reducir el estrés y la ansiedad. Así como a mejorar nuestro estado de ánimo y aliviar la depresión. Se dice que si te enfadas vayas a darte una vuelta para calmar los nervios. Y es que al caminar cambiamos la situación en que nos encontramos, respiramos, nos oxigenamos. En definitiva, nos relaja.
Caminar 60 minutos al día también nos ayuda para que por las noches podamos dormir mejor y descansemos bien. Otro beneficio es que ayuda a nuestra concentración y a que podamos reflexionar y pensar sin agobiarnos.
Si aprovechas para salir a darte un paseo después de comer activas el metabolismo y ayudas a quitarte ese peso extra que no necesitas. No es necesario hacer grandes caminatas ni ir a un ritmo rápido, solo encontrar un poco de tiempo para darte un paseo.
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